Una exitosa lactancia materna

Esta semana ¡estamos celebrando la Semana Internacional de la Lactancia Materna! Una semana donde no solo se usa para celebrar, pero también para concientizar a millones de mamás sobre la importancia de la leche materna, y brindar apoyo y recursos para una exitosa lactancia (si así lo desean).

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses de edad y, a partir de entonces, la introducción de alimentos sólidos, manteniendo la lactancia hasta los dos años o más. Sin embargo, la UNICEF reporta que en México, el promedio de bebés amamantados los primeros 6 meses de vida es de 14.4%, lo que coloca al país en el último lugar de Latinoamérica. ¿Porque un porcentaje tan bajo? Esto se debe a muchos factores que incluyen la falta de información y falta de apoyo, en especial la falta de apoyo cuando una mamá regresa a trabajar. Muchas mujeres se preguntan cómo pueden seguir amamantando cuando regresan a la actividad laboral y tienen que separarse del bebé tantas horas. Pues, aunque parezca imposible, no lo es. Existen soluciones y derechos para seguir amamantando aun después de regresar al trabajo.

Ser mamá jamás te debe impedir seguir haciendo tu trabajo profesional y tu trabajo como mamá.

Por eso te compartimos como almacenarla.

¿Cuánto tiempo puede conservarse la leche?

  • La leche se puede mantener de seis a ocho horas a temperatura ambiente, si no hace mucho calor.
  • En el frigorífico se conserva sin problema dos días, en un recipiente de cristal o de plástico que cierre bien. No es necesario esterilizar, pero sí lavar y secar bien el envase.
  • Lo mejor es utilizar cada día la leche de la jornada anterior y tener una reserva congelada para emergencias, por si algún día no es posible sacarse.

¿Cómo congelar, descongelar y calentar?

  • La leche se puede conservar de tres a cuatro meses en un congelador de tres estrellas y seis meses o más en un arcón.
  • Puede congelarse en tarros de plástico que cierren bien o en bolsas de congelación. Conviene utilizar recipientes pequeños con una sola toma.
  • Hay que poner la fecha y hora de extracción, tanto en las bolsas como en los envases, para poder usar las reservas en orden cronológico, empezando por las más antiguas.
  • La leche se puede descongelar lentamente, dejándola en el frigorífico unas horas antes o justo antes de usarla poniendo la bolsa o el tarrito bajo el chorro de agua fría.
  • Para templarla, lo más adecuado es sumergir el recipiente o la bolsa en agua caliente. Si se usa el microondas no debe calentarse demasiado, para que la leche no pierda propiedades.

Reincorporarse al trabajo no significa dejar de dar el pecho a nuestro bebé. Existen soluciones para mantener la lactancia cuando se acaba la baja maternal: se puede guardar la leche materna en la nevera, congelar, dar a demanda cuando se llega a casa…

Estamos aquí para hacerte sentir Querida, apoyada e informada.

Leave A Reply

Navigate