Noticia de Nueva Zelanda
Dai Henwood, exitoso comediante neo-zelandés y ganador de múltiples reconocimientos,
admite que se convirtió en bully en la escuela, al defenderse de los que lo molestaban debido a su estatura.
“He tenido esta estatura y este peso desde que tenía 12 años… y sí, me sentía acosado”, dijo el comediante a los estudiantes de Howick College a principios de junio.
“Pero siempre he sido ingenioso, y mi trabajo ahora es hacer reír a las personas. Sé de lo que hablo. Pero hay un límite”, añade.
“Hay una frasecita que decimos, “Es sólo una broma”. Pero hay una línea bien marcada, entre una broma y una intimidación y he aprendido que las palabras pueden ser muy fuertes y lastimar mucho a las personas”.
Howick College ha lanzado ‘The Big Stand’, una campaña anti-bullying.
La escuela -con un alumnado de 1800 jóvenes- comenzó la campaña para crear conciencia entre los jóvenes que la intimidación no está bien.
En una serie de asambleas mostraron videos de alumnos hablando sobre sus dolorosas experiencias de intimidación y animando a otros alumnos a defenderse de los bullies en el patio de recreo.
Henwood dijo que siendo muy joven, fue a menudo acosado y objeto de burlas y se defendía haciendo bromas y contando chistes sobre otros, y al hacerlo se convirtió en bully él mismo.
Estudiantes de todas las edades, algunos vistiendo las camisetas “Big Stand” aplaudieron de pie a sus compañeros que dieron su testimonio personal sobre la intimidación.
Alfred Ting, de 16 años, dijo que se unía al movimiento porque había visto mucho comportamiento de acoso a su alrededor y simplemente no quería verlo más.
Walker Kimiangatau, también de 16, escribió una canción para compartir su historia y animó a sus compañeros de clase a no acosar.”Haz el cambio”, dijo. “No te rías cuando no es gracioso, no te quedes ahí parado, solamente viendo y no lo dejes pasar. Sé el cambio”.
La directora, Iva Ropati dijo que la campaña, que ya tiene más de dos semanas, ayudó a considerar como normal la idea de enfrentarse a los bullies.
La campaña fue dirigida a aquellos que se quedan parados observando una pelea o un comportamiento bully, como si fuera algo normal, lo dejan pasar sin reaccionar, en lugar de defender o impedirlo.
“Ellos son los silenciosos, quienes darán al bully el beneficio de la risa que está buscando. Presencian los ataques pero tienen demasiado miedo para decir algo”. “Lo más importante para mí es que los jóvenes sepan cómo relacionarse y cómo deben tratarse unos a otros” agrega Ropati.
El presidente de la Federación de Directores, Philip Harding elogió la iniciativa de Howick College e insistió en que la intimidación seguía siendo un problema para muchas otras escuelas del país.
“Es un tema que se esconde en las sombras. Muchos niños que son acosados mantienen en secreto su situación. Es parte de nuestra cultura nacional ‘no andar con cuentos’. Las escuelas y todo su personal necesitan ser responsables de lo que les corresponde en este asunto y ayudar a los estudiantes a cambiar su visión”.
Una cosa son ‘los cuentos’ y otra es cruzar la línea bien marcada, de la que habla Henwood.
Fuente: nzherald.co.nz