Tener atracones de comida chatarra durante la adolescencia, puede aumentar la probabilidad de desarrollar cáncer de mama han advertido los científicos. Las niñas adolescentes jóvenes, que suelen saturarse de comida basura, pueden estar en mayor riesgo de cáncer de mama más adelante en su vida, dice una investigación reciente.
El aumento de la grasa es lo que las hace más propensas a desarrollar cáncer de mama. El estudio afirma que es la cantidad de grasa ingerida, no el que tengan sobrepeso, lo cual es muy significativo.
Los científicos encontraron una fuerte relación entre la ingesta de alimentos con alto contenido de grasa durante la pubertad y la velocidad con que se desarrollan las células cancerosas. Un estudio pre- clínico encontró que antes de que aparezcan los tumores se producen cambios en la mama que incluye el aumento del crecimiento celular y alteraciones en las células inmunes.
Los cambios continúan en la edad adulta y pueden conducir a lesiones pre-cancerosas, la etapa temprana de cáncer de mama.
También se encontró que las niñas con un alto consumo de grasa tenían una firma genética distinta en sus tumores, asociados con las formas más graves de cáncer de mama.
La profesora Sandra Haslam, en Michigan State University, dijo: “Esto es muy importante porque a pesar de que el cáncer se debe a mutaciones al azar, la firma genética que indica un cáncer de mama muestra la potente influencia que este tipo de dieta tiene en la mama”.
La investigación, financiada por una subvención del Environmental Health Sciences y el Nacional Cancer Institute, podría cambiar la forma de pensar acerca de la grasa corporal.
El profesor Richard Schwartz, también de la Michigan State University, dijo: “Es importante tener en cuenta que, dado que nuestro modelo experimental no implicaba el aumento de peso en la dieta alta en grasas, estos hallazgos son relevantes para un segmento mucho más amplio de la población, no sólo aquella parte que tiene sobrepeso. Esto demuestra que el factor causante es la propia grasa, en lugar de la ganancia de peso”.
Los científicos creen que la grasa, en este caso las grasas saturadas, podrían potencialmente, todavía ser perjudiciales incluso si una dieta baja en grasas es seguida más tarde en la vida.
El profesor Schwartz advirtió, sin embargo, que esto todavía no está claro y requiere más investigación.
Y agregó: “En general, nuestra investigación actual indica que evitar la grasa excesiva en la dieta puede ayudar a un menor riesgo de cáncer de mama.
La investigación es parte del consorcio Breast Cancer y del Environmental Research Program, que estudia las causas del cáncer de mama.
Fuente: telegraph.co.uk