El ejercicio puede ser tan eficaz como algunos medicamentos, para reducir el riesgo de muerte en pacientes con accidente cerebro-vascular o personas con enfermedades del corazón, dice un estudio.
Investigadores de la London School of Economics, Harvard Medical School y la Stanford University School of Medicine compararon los resultados de varios estudios sobre la efectividad del ejercicio en comparación con los fármacos en personas con enfermedad coronaria, ictus, personas con pre-diabetes y aquellos con insuficiencia cardiaca.
Se analizaron los resultados de 305 ensayos controlados aleatorios con 339,274 personas. La recopilación de los datos decía que “No se encontraron diferencias estadísticamente detectables” entre el ejercicio y el tratamiento farmacológico para reducir la mortalidad de las personas con enfermedad cardiaca coronaria o síntomas de pre-diabetes, según un comunicado publicado por la British Medical Journal (BMJ), que publicó el estudio en línea.
En pacientes con accidente cerebro-vascular, el equipo encontró que el ejercicio era más efectivo que los medicamentos, mientras que los medicamentos funcionaban mejor en el tratamiento de la insuficiencia cardiaca.
El equipo pidió más pruebas para respaldar sus conclusiones, dada la actual escasez de información sobre el tema.
Mientras que el ejercicio es un factor clave para una mejor salud y una larga vida, las investigaciones se han centrado más en el uso de las drogas.
La investigación médica, dijo que el equipo parece favorecer cada vez más las intervenciones con drogas sobre las estrategias para modificar el estilo de vida.
“El cuerpo actual de literatura médica, principalmente para los médicos, promueve fuertemente las opciones de medicamentos”, en lugar de prescribir ejercicio en los casos en que esto puede ser un tratamiento más eficaz.
Hasta que se sepa más, el ejercicio “debe ser considerado como una alternativa viable a, o junto a, la terapia de drogas”, escribió el equipo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que la inactividad física es el cuarto factor de riesgo líder para la mortalidad global, causando un estimado de 3,2 millones de muertes en el mundo cada año.
Fuente: japantoday.com
