Uno de los momentos más agradables del hombre es la lectura; en revistas, periódicos o cualquier tipo de publicación. Siempre se tiene algún interés, háblese de fútbol o de política, de ciencia o arte.
Pero, el otro día me llevé una sorpresa desagradable leyendo a un articulista con un escrito muy bueno y muy interesante donde me sorprendí que utilizara el término “discapacitados”.
Me permito sugerir que lo retiremos del vocabulario, pues es una denominación peyorativa para las “personas con discapacidad”, que tras años de reivindicación han conseguido erradicarlo del lenguaje utilizado por las personas concienciadas con su situación.
La discapacidad no está en la persona como ser humano, sino que se trata de que una persona tiene una discapacidad en una funcionalidad concreta, lo que no la descalifica en su conjunto.
Tras años de lucha se logró olvidar el término minusválido y actualmente se ha conseguido también evitar la palabra discapacitado. Incluso ahora se está debatiendo un nuevo término que pretende ir un paso más allá y hablar de personas con diversidad funcional.
Noticia de España
Fuente: elpais.com