- Mejora la circulación sanguínea. Por medio de la presión ejercida sobre los músculos los cuales estimulan la circulación sanguínea del cuerpo y, debido a esto, los órganos de todo el cuerpo reciben mayor cantidad de oxígeno. Esto resulta muy interesante especialmente en personas con problemas circulatorios.
- Elimina toxinas y células muertas. Un masaje relajante estimula el flujo linfático, lo que ayuda a eliminar toxinas y células muertas proporcionando así una piel más joven y bella.
- Alivia dolores musculares leves. Relaja los músculos y calma los nervios, devuelven al musculo toda su elasticidad perdida. Eso sí, ¡es muy importante que sea impartido por un profesional! Si no, las consecuencias pueden ser muy negativas. En el caso de ser dolores musculares fuertes, será más efectivo un masaje terapéutico en lugar de relajante.
- Hidrata la piel. Lo normal es utilizar algún aceite o crema para masajes, recomendablemente de alguna tienda de cosmética natural online, de esta forma, nuestra piel se hidrata dotándola de una mayor elasticidad.
- Ayudan a relajarnos. La tensión muscular causa limitación de los movimientos naturales del cuerpo, lo cual puede volver pesado las actividades de la vida diaria.
- Ayudan a nuestro sistema linfático. Al no ser un masaje de mucha profundidad este pasa por encima de la linfa la cual puede llegar a los ganglios linfáticos para ser drenado.
- Calman el dolor muscular. Puede ayudar a calmar el dolor muscular por fatiga o acumulación de ácido láctico.
- Ayudan a estimular el sistema glandular lo que estabiliza las hormonas.
- Ayudan a aliviar la presión en la espalda, el cuello y las articulaciones causado por mala la postura o debilidad muscular.
- Ayudan a dormir mejor.
Un masaje relajante es ideal para disminuir los niveles de tensión o estrés y recuperarnos del cansancio, pero no sólo eso, ya hemos visto que posee una gran variedad de beneficios para nuestra salud.